El primer ataque de ransomware se produjo en 1989 y fue posible gracias al disquete. Sin embargo, no fue hasta que llegaron las criptomonedas y los pagos “irrastreables” en la década de 2010 que su prevalencia como método de ataque se disparó.

El crecimiento de las criptomonedas es sólo una de varias tendencias clave que han impactado el panorama del ransomware. En otros lugares, por ejemplo, las relaciones internacionales desempeñaron un papel. Los atacantes y las víctimas rara vez viven en el mismo país, por lo que lidiar con los delincuentes requiere cooperación policial transfronteriza. Estados Unidos y Rusia comenzaron a trabajar juntos para lidiar con las pandillas con base en Rusia antes de que la guerra de Ucrania pusiera fin a esa cooperación.

Source link